Una campaña de email marketing es mucho más que un simple envío de un
correo electrónico. Es un canal de comunicación con tus clientes donde puedes
mantenerlos al día de las novedades de tu empresa, fidelizarlos, mostrarles
nuevos productos…
Pero para conseguir todo esto, primero tienen que
abrir el correo que les envíes. Aquí es donde entra en juego la persuasión. ¿De qué manera puedes convencer
a los usuarios para que abran tu mail cuando tienen 12 más esperando en la
bandeja de entrada? Y
una vez abierto, ¿cómo conseguir que hagan clic y vayan a la landing de destino
que has designado?
1) Cuida el asunto del correo:
El asunto es la frase que ves
en la bandeja de entrada antes de abrir un correo.
Es lo que marcará la diferencia entre un buen ratio de apertura o que el receptor ni si quiera se
moleste en abrirlo.
También juega un papel
fundamental la personalización. Es decir, si conoces el nombre
del suscriptor, sería conveniente utilizarlo en el asunto, no es lo mismo decir
“Te damos un 10% de descuento hasta finales de agosto”, que decir, “Juan, te damos 10% de descuento
hasta finales de agosto”. De esta manera crearemos una
sensación de cercanía con el receptor.
2) Nombre del remitente:
Piensa que el nombre de quien
hace el envío es otro de los campos que el usuario ve antes de abrir el
correo. De ahí que si queremos generar confianza, y que el
usuario abra el correo, debemos tener definido un nombre acorde con nuestra marca y
mantenerlo en el tiempo de cara a que el usuario pueda
reconocer más adelante que somos nosotros quienes le está enviando una
comunicación.
3) Piensa en dispositivos móviles:
Seguro que te suena esta imagen
al abrir un correo en el móvil: todo desencajado, textos
enormes, poca usabilidad, etc. Debe diseñar campañas de email
marketing de tal manera que puedan adaptarse a cualquier dispositivo. ¿Por qué?
Sencillamente porque hoy en día el usuario es multidispositivo.
Además, es recomendable que
antes de hacer un envío definitivo hagas un envío de prueba a tu dispositivo para comprobar que
todo funciona correctamente.
4) El cuerpo del mensaje:
Si un usuario abre tu correo,
el mensaje que se encuentre en su interior debe ser convincente y conciso.
Para ello hay que tener en cuenta el lenguaje, el tono de comunicación, lo
persuasivo que sea el mensaje… Todo ello aumentará la probabilidad de que el lector haga finalmente clic.
5) En este caso, la imagen
también importa:
Al abrir el correo, si incluye
alguna imagen, esta debe ser visualmente atractiva y
que refuerce el mensaje que queremos transmitir. Además, es más probable que el
usuario se fije antes en las imágenes
que en el texto, por lo que sí estas no le convencen, cerrará
el correo.
6) Utiliza llamadas a la
acción:
El objetivo de una campaña de mail
marketing es que los receptores hagan clic y lleguen a la página de destino que hayamos marcado. Por eso, una
buena llamada a la acción es uno de los componentes a tener más en cuenta en tus campañas.
La llamada a la acción debe
ser clara, llamativa, quedar en la
primera parte de la pantalla…Estos son algunos consejos.
7) Mide los resultados:
Todo el proceso no servirá de
nada si todo termina en el “Envío”. Una vez enviado, hay que ver cómo ha funcionado la campaña para tomar decisiones y seguir incorporando
mejoras y testeando en la siguiente.
Sobre todo tienes que analizar
la tasa de apertura del mail, así como el número de clics una
vez abierto el correo. También puedes analizar en dónde ha hecho clic el usuario para conocer de esta manera
qué contenido es el que más le interesa, la tasa de conversión desde email, etc.
FUENTE:
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